La Cámara de Diputados dio media sanción a un proyecto que aumenta el financiamiento de las universidades nacionales. La iniciativa establece una recomposición presupuestaria, actualizaciones por inflación y mejoras salariales para docentes y no docentes. 

El proyecto fue aprobado por 158 votos afirmativos, 75 negativos y 5 abstenciones, y será girado al Senado, donde también tendría apoyo. Impulsado por el Consejo Interuniversitario Nacional, el texto busca elevar el presupuesto universitario al 1% del PBI, incluye fondos especiales para nuevas carreras estratégicas y garantiza la actualización de partidas según la inflación.

Además de contemplar mejoras para el funcionamiento de universidades, hospitales y programas de extensión, el plan establece una recomposición salarial desde diciembre de 2023 y propone que, en 2025, todas las sumas no remunerativas se incorporen al salario básico. También prevé controles de la Auditoría General de la Nación sobre el uso de los recursos.

El debate estuvo marcado por fuertes cruces entre la oposición y La Libertad Avanza. Mientras diputados de distintos bloques destacaron la necesidad de defender la universidad pública y garantizar su funcionamiento, el oficialismo advirtió que el proyecto no especifica cómo se financiarán los nuevos gastos. Tras la votación, desde el entorno presidencial reafirmaron su postura con un mensaje escueto: “El superávit fiscal no se negocia”.