El organismo sanitario rechazó la continuidad de pruebas sobre la vacuna Ourovac, importada por Tecnovax desde Brasil, tras detectar que no cumple con los requisitos de estabilidad térmica exigidos por la normativa argentina.
El Senasa rechazó la vacuna antiaftosa importada por Tecnovax, luego de comprobar que no cumplía con los estándares mínimos de estabilidad térmica y potencia. A 37°C, la vacuna perdía efectividad, comprometiendo su capacidad para inmunizar correctamente al ganado.
A pesar de este rechazo, el Gobierno nacional emitió una resolución exprés para incluir a Brasil en la lista de países autorizados para importar vacunas veterinarias. La medida se tomó rápidamente y generó sorpresa en el sector sanitario.
La controversia se profundiza en un contexto donde la sanidad animal es clave para la economía del país. Expertos advierten que la autorización de productos que no cumplen con los estándares puede poner en riesgo la salud del sector ganadero y afectar la confianza en los controles oficiales.
El Metropolitano 