El diseñador Benito Fernández compartió su experiencia tras atravesar una grave crisis personal y financiera. En medio de una quiebra y problemas familiares, enfrentó una profunda depresión que lo llevó a buscar ayuda profesional.

Benito Fernández pasó por uno de los momentos más difíciles de su vida, donde combinó una quiebra de su línea de prêt-à-porter con una crisis familiar, distanciándose de su hijo. Además, reveló que sufrió una depresión tan grave que fue necesario internarse en una clínica para su tratamiento.

El diseñador comentó que, a pesar de la dificultad del proceso, la decisión de internarse fue crucial para su recuperación. Aconsejó a quienes atraviesan situaciones similares que busquen apoyo y no enfrenten sus problemas en soledad.

En cuanto a su carrera, Benito lamentó el cierre de su marca pero se mostró optimista, destacando que ahora se enfoca en un nuevo proyecto inmobiliario en La Plata. Además, reubicó su parte de alta costura en un nuevo espacio para continuar adelante.

Tras superar el pico de estrés y la depresión, Benito reflexionó sobre los prejuicios sociales respecto a las enfermedades mentales. A pesar de su miedo a la cancelación por su estado, expresó que hoy se siente renovado y listo para retomar su vida profesional.